Feliz cumpleaños “Bufalo”

Juan Gilberto Funes nació en San Luis, Argentina, el 8 de marzo de 1963. Desde pequeño, se destacó por su contextura física, algo poco común en los niños de su edad. Alto, fuerte e inteligente, fue comprendiendo los preceptos del fútbol y, poco a poco, fue ascendiendo en las categorías del fútbol argentino.

El “Gordo”, como lo llamaban los amigos del barrio, llegó a Gimnasia y Esgrima de Mendoza en 1983, donde se destacó marcando algunos goles y saliendo campeón de la Liga Mendocina. Funes era uno de los delanteros más destacados del ascenso argentino. En 1984, los directivos de Millonarios FC decidieron ir en busca del joven delantero argentino. Con 21 años, el “Búfalo de San Luis”, como lo apodó el desaparecido Jaime Ortíz Alvear, llegó a Bogotá para reemplazar al uruguayo Wilmar Cabrera, quien había sido vendido al Valencia de España.

Siempre alegre, tranquilo y bonachón, llegó a trabajar bajo las órdenes de Jorge Luis Pinto. Debutó el miércoles 12 de septiembre de 1984 en la victoria de Millonarios FC ante Deportivo Cali (4-0). Si bien el argentino no marcó gol, la afición destacó su entrega y compromiso. Para la siguiente fecha, llegaron los dos primeros goles frente a Bucaramanga, en un partido que nuestro equipo ganó 3-2 con un doblete de Funes.

Luego de esto, pasaron 12 fechas sin que el “Búfalo” volviera a marcar. Se especulaba mucho sobre su condición física, y algunos pensaban que todo había sido una ilusión pasajera. Sin embargo, llegó el partido frente a Junior en el “Campín”, donde Funes marcó los goles 2999 y 3000 de la historia del “Embajador”.

En 1985, el banquillo de Millonarios FC fue asumido por el maestro Eduardo Luján Manera. Para esa campaña, el nuevo entrenador decidió hacer algunos retoques tácticos y contrató a Marcelo Trobbiani, quien se convertiría en el socio ideal de Funes, acompañado por Arnoldo Iguarán, formando una delantera temible.

Durante esa temporada, el “Búfalo” marcó 31 goles en el campeonato regular, y en la fase final del torneo anotó 15 goles en 14 partidos, más de un gol por juego, algo increíble en ese momento. En febrero de 1986, River Plate le hizo una oferta a Funes. El delantero decidió regresar a su país para jugar en el equipo del que era hincha desde niño.

Ese River, conducido por el “Bambino” Veira, contaba con una nómina de lujo: Ruggeri, Alzamendi, Gallego, entre otros grandes nombres, a los que se sumaba el de Juan Gilberto Funes. Un equipo demoledor que llegó a la final de la Copa Libertadores, ganándole el título a América de Cali. De esa final quedará para la posteridad la actuación de Funes, así como la imagen de verlo cantar el himno de Colombia mientras algunos de sus compañeros de equipo lo insultaban.

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